El evento tiene lugar este fin de semana en Las Vegas. Cincuenta hombres pagaron 4500 dólares para poder elegir entre un catálogo de cien mujeres.
“Sex Island”, el evento controvertido que ofrece “sexo y alcohol ilimitados” durante cuatro días, volvió este fin de semana tras varios años sin celebrarse por la pandemia de coronavirus.
El precio de las entradas no es precisamente barato: los interesados en el fin de semana de lujuria que tiene lugar desde el 5 hasta el 8 de mayo tuvieron que desembolsar unos 4.500 dólares, pagados por transferencia o con criptomonedas.
La empresa The Good Girl Company, que organiza el evento sexual, asegura que es “el sueño perfecto de cualquier hombre”.
Los participantes son cincuenta hombres que podrán elegir cada uno a dos mujeres entre cien prostitutas. Además, habrá “actividades sexuales” que incluirán blackjack, paseos a caballo y un concierto.
La fiesta promete sexo ilimitado durante cuatro días. (Foto: gentileza Sex Island).
Al anunciar el evento, la compañía dice que “somos una empresa dedicada exclusivamente al entretenimiento para hombres”, pero agrega que es “amigable para parejas, y definitivamente puede venir con su esposo/novio/pareja”.
El sexo sin preservativos será otra de las particularidades de esta fiesta sexual. “Todas nuestras chicas están en perfecto estado de salud y han pasado los pertinentes controles sanitarios para asegurarnos de que no pueda haber transmisión de ninguna enfermedad sexual”, afirmó la compañía organizadora.
Un video promocional muestra a mujeres en bikini con un hombre en un jacuzzi, un helicóptero y a caballo. Los participantes son supuestamente llevados a un lugar mantenido en secreto en el estado de Nevada.
¿Sex Island, una estafa?
El sitio Scam Detector reporta quejas de personas que dicen haber sido víctima de una estafa. “Sex Island canceló el evento solamente un día antes de su inicio sin dar explicación alguna”, dijeron las supuestas víctimas, que nunca volvieron a ver su dinero.
Pese a los rumores, todo sigue adelante y en el New York Post, el jefe de la empresa sostuvo que “las vacaciones sexuales son legales y legítimas y tenemos todos los permisos para que se celebre. No habrá cancelación y todos los que han comprado sus entradas podrán participar”.