El insólito hecho ocurrió durante el calentamiento del juego entre los Catalan Dragons y los St. Helens RFC en el Stade Gilbert Brutus, de la ciudad de Perpiñán.
Mientras los atletas se estaban preparando para el inicio del partido, el toro irrumpió en el terreno de juego luego de zafarse de la persona que lo estaba cuidando.
El animal fue cautivado por el color rojo del uniforme de los Catalan Dragons, por lo que comenzó a perseguirlos.
Afortunadamente, los jugadores lograron librarse del toro, que había sido invitado de honor por parte del dueño de los dragones luego de haber organizado un concurso de ganadería para celebrar la calidad de los ejemplares en la región.
La idea era que el toro realice una vuelta simbólica previo al comienzo del partido.
El suceso del toro invadiendo el partido de rugby en Francia fue insólito, pero no fue el primer animal en hacer algo así. Perros, gatos, vacas y otros animales han interrumpido encuentros de fútbol en múltiples ocasiones.
Un ejemplo de esto ocurrió en el año 2014 en la Tercera División de Perú, cuando durante un partido unas vacas invadieron la cancha. Una vez que cruzaron, el partido continuó sin interrupciones.
En la eliminatoria de Sudáfrica 2010, durante el partido entre la Selección Mexicana y la de Nicaragua, un enjambre de abejas se posó sobre la portería defendida por el portero guatemalteco en el Estadio Azteca.
Por último, en una ocasión durante la Copa MX de 2013, durante el partido entre Rayados de Monterrey y Monarcas Morelia, un par de patos también hicieron acto de presencia en el campo.